Tu Silencio (no es mio)

Hola a todos!
bueno pues con el permiso de Estefiitha les he traido su fik, aqui se enfocan mas en Sango y Miroku pero aun asi... esta hermosa la historia, espero les guste. Auki creo que tu ya sabes de cual se trata n_n

***TU SILENCIO***

Capitulo 1
Café instantáneo.

Siempre dude que mi vida fuera real, casi siempre me sentí culpable por la buena fortuna que tenia, y no era que me ganara premios en juegos de azar, era mas bien la calidez que me rodeaba cada día, la maravillosa familia en la que nací, el poder dedicarme a lo que hacia feliz en la vida, mi buena salud, el amor y la naturalidad con la que despertaba cada día sintiendo que todo era perfecto.

Pero lo que en realidad me hacia sentir culpable era sin duda alguna, que pese a todo lo maravilloso de mi vida, no me podía sentirme feliz. Solía sonreír mucho, pero pocas veces era una sonrisa autentica. Kuranuske, mi novio, solía decirme que mis ojos no sonreían cuando mis labios lo hacían, parecía conocerme muy bien y yo lo amaba, pero creo que no al mismo nivel que el me amaba a mi.
Tal vez ahora seguiría ahí, atrapada en mi hermoso mundo de cristal sintiéndome miserable, pero creo que el destino tenia planeado lanzarme una cubeta de agua fría en la cara para hacerme despertar. Todo comenzó con una simple llamada de Kagome, una amiga de la infancia que llevaba cuatro años trabajando en el Hospital Shikon no Tama en Kyoto, y que pese a vivir tan lejos de donde nos criamos, nunca dejo de mantener contacto conmigo, era mi amiga lejana mas cercana.

Recuerdo que cuando llamo la note un poco extraña, ansiosa de una manera poco usual en ella. Trate de llevar una conversación natural para no hacerla sentir incomoda, sabia que tenia algo que decirme y no quise presionarla.

“Me alegra que todos estén bien en Tokio, la verdad los extraño mucho”

“Lo se Kag, llevas mucho tiempo sin pararte por acá”

“Si, pero prometo que iré, tengo ganas de que Inuyasha conozca el lugar en el que me
crié, tengo ganas de que lo conozcas”

“Oh, yo también quiero que conozcas a Kuranuske”

“Sango, tengo algo que decirte”

“Lo se”

Escuche un suspiro por el auricular y me imagine perfecto que mi amiga estaría mirando al suelo nerviosa como hacia cada vez que tenia que decir algo importante.

“Estoy embarazada”

Mi sorpresa se manifestó en un pequeño grito que no pude contener, sentí que mi corazón latía rápido, y mis manos comenzaron a sudar, me emocione mucho, no sabia que decirle.

“¿En serio?, Kagome, no lo puedo creer!! Felicidades¿ya lo sabe Inuyasha?”

“No, aun no lo sabe, estoy muerta de miedo¿que tal si no quiere tener hijos¿que tal si me abandona?”

“¿por que piensas eso?”

“ Hace apenas un año que salimos seriamente.. Sango, tengo mucho miedo, te necesito”

Te necesito, eso fue todo lo que me tuvo que decir para hacerme partir a su lado casi de inmediato. Recuerdo haber pedido vacaciones en el hospital en el que trabajaba como interna en la Sala de Emergencias para ir a su lado cuando le diera la noticia a Inuyasha, estaba segura de que ningún chico la dejaría o se negaría a que ella fuera la madre de sus hijos, pero una nunca sabe, ademas tenia que darle el visto bueno al individuo en cuestión. Kuranuske quería acompañarme pero no consiguió días libre en su trabajo. Empaque un par de maletas y partí de Tokyo sin saber que no regresaría en un largo tiempo.

Al llegar a Kyoto Kagome me recibió junto con Inuyasha, por supuesto el chico no sabia la razón de mi visita, eso era una ventaja para mi pues podría analizarlo en su ambiente natural.

La presentación fue bastante normal, el era muy apuesto, seguro el bebe seria hermoso, y la primera impresión mutua fue buena.

“Entonces se conocen hace dos años pero solo tienen un año de novios” pregunte pretendiendo no saber los detalles que Kagome me platicaba en nuestra llamada semanal de dos horas.

“Sí” el respondió sin fingir su apatía.

“¿Y como se conocieron?” inquirí

“En serio no te ha contado Kagome? Las mujeres suelen ser muy comunicativas en ese sentido” dijo con tono burlón.

“Si, me contó, pero quiero escuchar tu versión”

“Ah, ya veo, entonces es un examen”

“Si” le dije sonriendo. Note que me miraba por el espejo retrovisor, Kagome quien iba a lado de el también sonreía de forma infantil.

“La conocí por que ella es la residente a cargo de mi hermano en Terapia Intensiva. Un día fui a visitarlo y la vi poniéndole algo en el suero. Era la primera vez que iba a verlo en dos años que el llevaba ahí, ella fue la que me explico todo sobre su estado de salud. Después comencé a ir mas seguido y casi siempre conversábamos mientras ella lo revisaba. Fue así como nos conocimos”

“Si, no fue una situación alegre pero nos hicimos amigos y después algo mas” intervino Kagome al notar como se descomponía el semblante de Inuyasha al hablar de su hermano.

Su historia era triste, el hermano mayor de Inuyasha había sufrido un terrible accidente hace cuatro años. Salvaron su vida después de mucho esfuerzo por parte de muchos médicos prestigiosos. Pero desde ese día el chico permanecía en un coma muy profundo. Kagome me contó sobre las múltiples ocasiones en las que el propio Inuyasha desesperaba deseando que su hermano viviera, o muriera. Simplemente ya no quería verlo en ese estado.

Un rato después cuando estábamos en su departamento me reclamo muy enojada “ Sabes que no le gusta hablar de eso¿por que le preguntaste?”, tenia razón, yo sabia lo sensible que era en esas cuestiones y aun así lo cuestione, no me quedo más que disculparme.

Al día siguiente Kagome tenia turno, aun no habíamos decidido cuando y como le daría la noticia al chico, pero mientras tanto queríamos pasar tiempo juntas lo mas que pudiéramos. Fui por ella al hospital para ir a cenar, pero le llegaron un par de casos que tenia que atender. Por lo tanto me pidió que esperara.

Mi curiosidad me mantuvo entretenida un rato, el Hospital Shikon no Tama es uno de los mas prestigiosos del país y me encanto observar como trabajaban y lo moderno de sus instalaciones. Inspeccione un poco el lugar, un par de veces me metí en lugares permitidos solo al personal, obviamente salía sonrojada y apenada, pero esos pequeños incidentes no evitaron que siguiera investigando.

Paso una hora y no tenía idea sobre el momento en el que Kagome podría salir, me mando mensajes al celular disculpándose un par de veces, yo comprendía que en nuestro trabajo no hay horarios y le pedí que no se preocupara, pero la verdad ya comenzaba a aburrirme.

En el ala norte del hospital encontré una sala de espera al aire libre, era un balcón tan largo como un pasillo, con bancas y una vista hermosa. Compre un café y me senté. Mientras estaba sola pensé en lo que deje en Tokio y por mi cabeza paso la idea de no regresar, de ser independiente y buscar la felicidad como Kagome. Después me di cuenta que si fuera yo la embarazada de su novio, no estaría nada feliz. Comencé a sospechar que no amaba a Kuranuske. De repente alcance a vislumbrar una silueta en otra de las mesas, me sobresalte un poco pero después distinguí que era un chico haciendo lo mismo que yo, tomando un café y disfrutando de la vista.

Después lo observe con mas detenimiento y note que traìa puesta una pijama azul. Pensé que tal vez era un paciente. Paso un rato más y el chico se levanto dirigiéndose a la maquina de café .

Fue ahí cuando pude ver su rostro, me sonrío, y creo que me sonroje. Le regrese la sonrisa tímidamente. Escuche que puso monedas en la maquina de café y después de obtener la bebida se dirigió de regreso a su lugar. Sus pasos eran pausados y yo extrañamente me sentí nerviosa al escucharlos cada vez mas cercanos. Gire un poco mi rostro y lo observe mirándome. Nuevamente me sonroje y el al percatarse se detuvo a lado mio.

“¿Estas en espera de noticias?” me dijo con una voz cálida y segura, yo no quería voltear a verlo nuevamente, me intimidaba volver a ver sus hermosos ojos azules.

“Eh, no, soy amiga de una doctora y la estoy esperando” respondí tan rápidamente que no estoy segura de que haya entendido lo que dije.

“Oh ya veo, por eso no te ves angustiada” me respondió.

“Si, supongo que si. ¿tu estas internado aquí?” dije un poco mas tranquila.

“Si, algo así”

Finalmente lo voltee a ver, el seguía sonriendo. Supongo que a esa altura mi cara era mas roja que un tomate, pero aun así me arme de valor y lo invite a sentarse.

“Y ¿a que hora sale tu amiga?”

“Bueno, tenia que salir hace mas de una hora y media”

“Supongo que ya estas aburrida de esperar, ademas a nadie le gusta estar en un hospital” afirmo.

“De hecho, a mi me encanta, soy Doctora también”

“¿A si? que bien!, tal vez tu si me darás de alta”

La forma en la que lo dijo me hizo reír, a partir de ese momento tuvimos una platica natural y agradable, me contó que llevaba mucho tiempo en el hospital y que no sabían que estaba mal con el, no me quiso contar sus síntomas ni tratamientos y yo respete su decisión, ademas le conté que era Doctora de Emergencias y me hizo contarle algunos de los casos mas sangrientos que había tenido, el parecía fascinado escuchándome.

Después de lo que para mi pareceron minutos, recibi la llamada de Kagome “Estoy esperandote en la entrada del hospital¿donde estas?” pregunto un poco impaciente. No tuve mas opción que terminar mi fortuita buena tarde.

“Me tengo que ir”

“Sí, escuche”

“Me hubiera gustado platicar mas pero…”

“Ni te preocupes, diviertete con tu amiga”

“gracias, ojala te recuperes pronto”

“sí, gracias”

Nos levantamos y estrechamos nuestras manos. Sentí electricidad recorriendo mi cuerpo al sentir la calidez de su piel. Nos miramos a los ojos fijamente, sin duda alguna este chico me encantaba. Después comence a caminar hasta el elevador, que por cierto llego demasiado rápido para mi mala suerte. Subí y seleccione que me dejara en el lobby, justo había apretado el botón cuando escuche su voz nuevamente y alce la mirada para verlo una vez más.

“Por cierto¿como te llamas? Pregunto sin dejar de sonreírme.

“Sango” respondí gritando¿y tu como te llamas?

Solo alcance a mirar sus labios moviendose segundos antes de que las inoportunas puertas del elevador se cerraran atrapandome en su interior. A veces me sorprende lo torpe que puedo llegar a ser, llegue a esa conclusion mientras el elevador bajaba. ¿por que demonios no le pregunte su nombre desde el principio? Me reproche a mi misma.

Al llegar al lobby aprete el botòn del elevador nuevamente para regresar al lugar donde me encontre con el chico. Pero cuando subi solo me tope con el hermoso balcon tan largo como un pasillo, vacio y frìo. Resignada, baje de Nuevo al lobby para encontrarme con Kagome.

kyaaaaaaaaaaaa k hermosa historia pz espero k actualizes pronto lo esperare con ancias jajaja mi kerida hermanita se inspiro muxo en esta hist.

kya!! sí!!! genial, esta historia esta´hermosa!!!! XDDD espero pronto lo continues *-* gracias por publicarlo aquí!!

Agradecimientos a Estefiitha ke concedio su permiso para ponderlo aki...
Disfruten del cap n_n

Capitulo 2
Un sueño

Por supuesto Kagome noto mi repentino entusiasmo, al principio dude un poco en contarle lo que me había sucedido por que me sentía las mas grande tonta del universo. Y como era de esperarse su reacción cuando se lo conté, me lo confirmo.

“No puedo creer que no le preguntaste como se llamaba” me dijo casi carcajeándose, yo sonrojada solo pude admitir mi tontería, pero finalmente mi orgullo me hizo responder “si le pregunte, pero el elevador se cerro cuando me estaba respondiendo”

Supongo que mi rostro de indignación-vergüenza era muy gracioso, por que después de lo que dije Kagome se soltó a reír. Su risa era tan contagiosa que ambas tuvimos un ataque de risa que duro hasta que el dolor de el estomago no quito las ganas de reír más.

“No te preocupes, puedes venir por mi mañana y esperarme de nuevo” me comento guiñándome un ojo mientras el mesero nos llevaba nuestros platillos. Yo solo sonreí, pero sentí una ansiedad extraña, nervios al pensar, “mañana lo podre volver ver”, creo que fue lo que comúnmente llamamos emoción, lo que llevaba años sin sentir.

Esa noche antes de dormir pensé en el, la paz que me hizo sentir mientras conversamos fue de algún modo “mística” era como si nos conociéramos desde hace años, fue como un recuentro con un viejo amigo “ mañana lo podre ver de nuevo” pensé antes de cerrar los ojos y quedarme dormida. Nuevamente como de costumbre, dormí sin soñar.

Al día siguiente, Kagome tenia solo medio turno, por lo tanto entraría mas tarde a trabajar, por la mañana fuimos de compras y a desayunar, me di cuenta que cada vez que quería platicar con ella sobre el embarazo se ponía un poco deprimida e intentaba cambiar de tema. Respete su incomodidad y le di su espacio. De regreso al departamento pasamos por una tienda de electrodomésticos, en la vitrina tenían algunas televisiones y estaban transmitiendo una película. Vimos una escena en la que una persona era desconectada para dejarla morir.

Kagome bajo la mirada, toco su vientre y comenzó a llorar discretamente.

“Que pasa Kag¿te sientes mal?”

“No, no es nada…” respondió secando sus lagrimas.

“Ven, siéntate aquí¿quieres agua o algo?” Le dije mientras la llevaba a una banca.

“Estoy bien solo, es que esa imagen me recordó al hermano de Inuyasha, y no pude evitar llorar”

“Oh, si, lo se, es una historia triste”

“Si, Sango, me gustaría tanto que Inuyasha fuera feliz”

“El es feliz!, te tiene a ti!”

“No es suficiente, el adora a su hermano… de algún modo me da miedo que el bebé y yo solo llenemos ese vació que siente ahora, que lo que siente no sea real después de todo”

“Eres una tonta”

“¿Que?”

“No se como dudas de su amor, cada que te mira no lo puede ocultar, esta perdidamente enamorado de ti”

“En serio crees eso?”

“Claro, si no, no te lo diría, ademas su hermano se recuperara tarde o temprano”

“no lo creo… Sango, lo que mas mal me hace sentir es…”

“¿que?”

“Deseo que se muera”

Me quede muda por un segundo, la severidad de sus palabras la hicieron irreconocible para mi por un instante, y luego reaccione al verla llorar de Nuevo.

“Soy una mala persona, deseo que se muera, que descanse en paz para que nos deje a Inuyasha y a mi vivir nuestras vidas sin su sombra”

“Kagome…”

“lo se, ahora me odias ¿cierto?”

“es natural lo que sientes”

“es decir, el no se recuperara! Lleva cuatro años en ese estado!”

“Tranquila” le dije mientras la abrazaba, el tono de su voz había subido tanto que algunos transeúntes nos miraban con extrañeza.

Unos minutos después recobro la compostura y seguimos nuestro camino a su departamento. Al llegar apenas le quedaba tiempo para darse una ducha y salir rumbo
al hospital.

“Te espero a las ocho” me grito antes de cerrar la puerta detrás de ella.

“Si, nos vemos a las ocho” pensé mientras me dirigía a ver un poco de televisión. El aparato estaba prendido pero mi mente no ponía atención a lo que transmitía. No pensaba en nada particular, solo estaba dispersa.

Me quede dormida en el sofá, no se cuanto tiempo fue, probablemente media hora, pero fue algo casi mágico, por primera vez en mucho tiempo pude soñar. Fue un sueño lindo, volaba pacíficamente sobre la ciudad, sobre el océano y sobre campos llenos de flores, finalmente descanse debajo de un árbol. Me sentía en mucha paz, me sentía eufórica, creo que era felicidad lo que recorría mi cuerpo. Sentí mi rostro sonreír sin ser forzado a hacerlo, y tuve una sensación tibia en mi mano.

Otra mano la sostenía, no me asuste al notarlo, al subir la mirada lo vi, estaba ahí el chico que conocí el día anterior, con su sonrisa coqueta y sus ojos risueños. Por descabellado que suene no me pareció raro que estuviera ahí, lo tome con naturalidad y continuamos tomados de la mano, hasta que el infernal teléfono comenzó a sonar con insistencia y me hizo despertar.

Ya predispuesta por la interrupción respondí de forma seca, y no sentí entusiasmo al escuchar que del otro lado de la linea se encontraba Kuranuske. Hable con el por 10 minutos sobre cosas banales y finalmente colgamos con el clásico “te extraño, te veo pronto” que yo por ningún motivo sentía en realidad. Por un momento me sentí culpable, pero pronto olvide esa culpa cuando vi el reloj señalando las 7 de la tarde.

Un poco exaltada por el poco tiempo que tenia, me apresure, me di una ducha, me puse mi mejor par de jeans, y una blusa sencilla pero linda. Cepille mi cabello esperando que luciera lo mejor posible y acentué un poco más mi maquillaje. Finalmente me puse un perfume que en opinión de todos me venia muy bien.

Salí emocionada y cuando estaba a cinco minutos de llegar al hospital me di cuenta nuevamente de lo tonta que me comportaba “solo voy a ver a Kagome y parece que voy a una cita” me mentí a mi misma tratando de ocultar mi entusiasmo por ver al chico misterioso de nuevo.

Llegue al hospital y pregunte por Kagome, me dijeron que estaba en cirugía y tardaría en salir, yo por supuesto encantada de la vida me resigne a una larga espera, y sutilmente comencé a escapar hacia el elevador para subir a la mágica sala de espera.
Mi entusiasmo se convirtió en desilusión cuando al llegar vi que el chico no estaba, nuevamente me sentí tonta cuando recordé que no sabia su nombre, y me senté buscando resignación, fue entonces cuando escuche su voz.

“ ¿De nuevo esperando a tu amiga?”

Trate de disimular mi sobresalto por la sorpresa lo mejor que pude, pero no lo suficiente, el pareció notarlo.

“Perdón, no quería asustarte”

“No, no te preocupes”

“Y entonces”

“oh, si vengo de nuevo a esperar a mi amiga”

“esa amiga tuya, recuerdame enviarle unas flores para agradecerle”

“por que le enviarías flores?

“Por que gracias a ella tengo el pretexto perfecto para verte”

En verdad, odio sonrojarme sin control alguno, lo peor es que el lo disfrutaba.

“Y entonces, a nombre de quien envió las flores?”

“No, creo que si recibe flores de un extraño su novio se pondría celoso, pero si quieres saber su nombre es Kagome”

Note un dejo de sorpresa en sus ojos, el también trato de disimular, pero al igual que yo, fallo.

“Kagome”

“Si, la conoces?” pregunte

“podría decirse…”

“por cierto, no me dijiste tu nombre”lo interrumpí ansiosa

“¿como no?!, te lo grite fuerte y claro”

“no es cierto”

“si, lo hice, cuando las puertas se cerraban¿no me digas que no me escuchaste?”

Nuevamente me sonroje avergonzada, me puse tan nerviosa que lo único que pude hacer fue jugar con mi cabello para apaciguarme

“no lo escuche” dije con un volumen de voz bajo

“¿como?”

“no lo escuche” repetí

“discúlpame, no escucho lo que dices” dijo burlonamente con esa sonrisa que tanto me gustaba.

“Por favor dime tu nombre” dije en voz alta y con la cara completamente roja.
El comenzó a reír sin pudor alguno, yo solo quería que me tragara la tierra ,hasta que me dijo “eres adorable Sango”

No supe como responder, pero lo mire directo a los ojos, el hizo lo mismo. Sin darnos cuenta nuestros rostros comenzaron a juntarse, pude sentir su respiración en mis labios, cuando un ruido seco nos asusto provocando que saltáramos y nos alejáramos uno del otro instintivamente.

Al girar el rostro hacia el origen del ruido, vimos a una enfermera anciana que había tirado unas charolas. Se disculpo por el ruido mientras se acercaba a nosotros.

“Houshi¿que haces aquí?” dijo en tono serio acercándose al joven que tenia a mi lado.

“Kaede!, solo estaba tomando un poco de aire”

“cuantas veces te he dicho que no salgas?”

“No lo puedo evitar, ella me llamo.. ¿verdad Sango?

Casi no pude evitar reírme al ver su expresión de niño regañado, y fue ahí cuando decidí vengarme de el por hacerme sonrojar.

“yo ni te conozco” dije en tono serio.

“¿Que? Como que no me conoces!?”

“no, ni se tu nombre”

“pero si me ibas a besar, que descarada”

“¿que? Tu eres quien me quería besar” respondí nuevamente con la cara completamente roja.

“no es verdad, Kaede, ella tiene la culpa” dijo con media sonrisa, misma que se desapareció cuando vio el rostro serio de la enfermera.

“Es suficiente Houshi, vamos a tu habitación” dijo en un tono aun mas regañón que la primera vez.

“esta bien” dijo “Houshi” resignado, ”nos vemos pronto, Sango” dijo levantándose de la silla.

“si” fue todo lo que pude responder mientras lo veía alejándose.

Lo vi subir al elevador con la anciana y entonces lo recordé.

“ De nuevo no me dijiste tu nombre!” grite al pensar con mas detalle que Houshi significaba Monje y que tal vez podría ser su apellido pero no su nombre.

Nuevamente vi sus labios moverse un poco antes de que la maldita puerta de elevador se cerrara encerrándolo detrás de ella.
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*
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seguimos con esta maravillosa historia
bye

JO!! xDDD recuerdo cuando leí esto me puse toda de NO MANCHES!!! DXXXX DILE SU NOMBRE!! XDDD pero bueno jajaja espero pronto la continuación ^^ gracias a Estef por prestarte el fic

Hola a todos!!! de nuew por aki dejando la conti del fik de Eztefiitha jejej weeenu me voy espero y les guste bye bye

Capítulo 3

Hermano.

Tan pronto como Kagome me vio, supo que algo me pasaba, cuando le conté que de nuevo vi al chico , y que de nuevo no averigüe su nombre, creo que sorprendió un poco. "no puedo creer que siendo tan lista pases por lo mismo dos veces" me dijo mientras movía la cabeza en señal de negación.

"pero al menos creo que se su apellido" le comente entusiasmada, ella solo me miro de reojo como esperando que siguiera hablando. "Podríamos buscarlo en el listado de pacientes" le sugerí directamente.

"Sango, eso es información confidencial" , me respondió con cara seria mi amiga. "Solo quiero saber su nombre, no me tienes que decir en que habitación esta ni nada" le dije con cierta ansiedad que ella reconoció de inmediato. Después sonrió mientras se acercaba a una de las computadoras de la recepción.

"Muy bien¿cual es el apellido del príncipe azul? me pregunto con intención burlona. " Houshi" le respondí mirándola con desdén fingido.

Tecleo la palabra y comenzó a buscar en la lista de pacientes, pasaron dos minutos y no hubo ninguna coincidencia. Me miro extrañada y me pidió que lo deletreara, pero nuevamente la búsqueda de la computadora no arrojo resultados.

"Tal vez no es su apellido, no suena como apellido" me dijo tratando de darme ánimos, " la enfermera lo llamo así" le respondí cabizbaja. "podría ser un apodo" sugirió Kagome , y no me pareció una idea equivocada. "¿recuerdas como era la enfermera?" me pregunto haciéndome recuperar un poco de animo por un segundo y sonriendo le respondí " Si, si, recuerdo que el dijo su nombre, Kaede"

"Ahhh, la anciana Kaede, yo creo que le podemos preguntar mañana u otro día, ella trabaja en cuidados intensivos, de hecho es la enfermera principal del hermano de Inuyasha, nos llevamos muy bien, seguro te dira el nombre de el misterioso Houshi"

"¿Mañana?" dije nuevamente desanimada

" Si, ya es muy tarde, estoy cansada y tengo hambre", me respondió Kagome con cara de fastidio.

Yo me resigne , por que cuando una mujer embarazada dice tener hambre, es motivo mas que suficiente para conseguirle comida en ese momento.

Al día siguiente la embarazada hambrienta trabajo desde temprano, me quede sola en el departamento y decidí hacer algo de limpieza. En eso estaba cuando comenzó a sonar el teléfono, la voz del otro lado de la linea sonaba profunda, varonil y educada, aunque de cierto modo, muy fría.

"Me gustaría saber si hablo con Kagome Higurashi"

"No, esta es su casa pero ella no se encuentra ahora mismo"

"Y de pura casualidad, no estará ahí mi hermano Inuyasha, estoy buscándolo desde hace rato pero no tiene prendido el celular, y como siempre esta ahí.."

"¿Tu eres el hermano de Inuyasha?!" dije cubriendo mi boca con la mano , me sentí llena de emoción.

"Si, soy Sesshoumaru, por favor si lo ve dígale que me urge verlo"

"Quieres que vayan por ti al hospital?" le pregunte casi gritando.

"¿al hospital?, no, creo que estas confundida, soy el otro hermano de Inuyasha, el real". Me dijo en un tono aun mas serio.

"oh, discúlpame por la confusión" dije apenada

"Esta bien, puedo preguntar ¿quien eres?"

"Oh si, soy Sango, amiga de Kagome, me asegurare de pasar tu mensaje"

"Te lo agradecería mucho, hasta luego"

Cuando colgamos sentí mi corazón latiendo a mil por hora, cuando creí que era el hermano de Inuyasha y que había despertado del coma me emocione mucho, no se por que asumí que el novio de mi amiga solo tendría un hermano.

Después del sobresalto que mi propia mente me produjo , continúe limpiando, mientras sacudía recordé el casi beso que "Houshi" me dio. Era tan tibio, y tan natural estar a su lado, su aliento parecía ser parte del mío, seguro seria un beso perfecto, pero tuvimos la inoportuna intervención de la anciana.

Un rato después de estar hundida en mis propios pensamientos sonó el timbre, al abrir la puerta fue mayúscula mi sorpresa al encontrar al propio Inuyasha parado afuera del departamento.

"Oh, Hola Inuyasha, Kagome esta en el Hospital" le dije al ver que el no hablaba.

"Lo se, por eso he venido a verte" respondió mas serio de lo normal, tanto que me recordó la voz de Sesshoumaru por teléfono.

"¿A mi? respondí con sorpresa y luego lo invite a pasar. Mientras el esperaba en la sala por su limonada le comente desde la cocina sobre la llamada que recibió.

"Ese idiota ¿que querrá ahora?"

"Sonaba muy serio" le grite desde la cocina.

"Seguro es algo sobre la empresa de mis padres, nunca habla conmigo mas cuando se trata de dinero"

"Oh,¿ tus Padres tenían empresas?" pregunte pretendiendo no saber algunas cosas que Kag me contó.

"Si, pero a mi no me engañas, cuando dices tenían es por que sabes que murieron..."

"Si, lo siento, Kag me contó, debe ser duro para ti" le dije sonriendo frente a el al entregarle la limonada.

"Si, fueron un par de años duros, pero no quiero hablar de eso ahora" me dijo con mirada melancólica. " Seguro estas extrañada de que venga a platicar contigo, casi ni nos conocemos, pero se que tu eres la mejor amiga de Kagome, y tal vez me podrías ayudar"

"Por supuesto, en lo que tu quieras"

"Yo la amo mucho" dijo sonrojado mirando al suelo.

"Lo se, y eso me hace muy feliz"

"La amo tanto que no quiero que continúe siendo mi novia"

"¿que?" dije exaltada al mismo tiempo que me levantaba del sillón.

"no, no tranquila, no es lo que piensas" me dijo Inuyasha apenado mientras me pedía que me sentara nuevamente.

"entonces a que te refieres?" pregunte aun sorprendida.

"a esto" dijo sacando de su chaqueta una pequeña caja negra y abriéndola frente a mi.

Me quede muda, no se cuanto tiempo fue, pero aunque mi mente trabajaba a mil por hora no sabia que decir. El estaba sonrojado e intimidado por mi reacción. Por fin después de unos segundos atine a decir.

"¿ le pedirás matrimonio?"

"si, quiero pasar el resto de mi vida junto a ella, por eso vengo contigo ¿te parece buena idea?"

Nuevamente me quede muda por unos segundos, los necesitaba para decidir si debía responder alegremente "¡si! pídeselo, ella esta embarazada", o simplemente reaccionar tranquilamente y aconsejarle que lo hiciera sin demostrar ansiedad que pudiera revelar su secreto. Hice lo segundo.

"Estoy segura de que le encantara la idea, ella te ama también"

La cara de Inuyasha se torno nerviosa, y finalmente admitió " no se como hacer la proposición, quería me que ayudaras" dijo mirando al suelo sonrojado por segunda vez.

"Por supuesto¿que tal si la invitas a cenar mañana?"

"mañana? es muy pronto!!!" respondió exaltado.

"Oye, yo me voy en 4 días, no me quiero perder algo tan importante para mi amiga."

"Pero mañana! osea solo 24 horas"

"si, no te preocupes, nos dará tiempo de hacer los arreglos necesarios" respondí muy segura de mi misma.

Después de un rato lo convencí, y le conté mi plan para hacer algo súper romántico, el me decía a cada rato " no soy tan cursi" y yo lo reprendía diciendo " pues Kagome si, y le gustara", a el no le quedaba de otra más que aceptar todo lo que yo le proponía, seguro se arrepintió de ir a pedirme ayuda. Pasamos como dos horas planeando, haciendo la reservación y planeando la compra de algunas cosas que necesitaría.

Finalmente se fue un poco mas tranquilo, pero me recalco algo antes de marcharse " no le digas nada a Kagome por favor". "por supuesto que no, eso arruinaría la sorpresa" le dije un poco indignada por la obviedad.

Por la tarde siguiendo la rutina que tanto me comenzaba a encantar, fui al hospital a esperar por Kagome, quien para mi mala suerte no estaba ocupada y podría salir a tiempo.

Me daba gusto estar con ella, pero no pude ocultar la desilusión que me causo no poder entrar a esperarla mientras "Houshi" me acompañaba. El sexto sentido de Kagome lo percibió y me dijo que buscaríamos a la anciana Kaede, y que si descubríamos el nombre de "mi príncipe misterioso" podría ir a buscarlo sin necesitad de tener el pretexto de esperarla a ella.

"Por eso me caes bien" le dije olvidando la cara de desilusión que tenia antes.

Subimos al cuarto piso, el de terapia intensiva y casi como si nos hubiéramos sincronizado, Kaede apareció frente a nosotras. La note un poco nerviosa mientras nos acercábamos, creo que no tuvo hacia donde esconderse para evitarnos, pero algo me decía que eso era lo que mas deseaba.

"Hola Kaede, vengo a presentarte a mi mejor amiga , Sango"

"Hola, ya nos conocimos" dijo sonriéndome.

"Si¿como esta? " pregunte tratando de sonar casual.

"Muy bien gracias" me respondió amablemente pero tratando de evitarme con la mirada.

" Kaede, mi amiga conoció a un muchacho el otro día, pero la tonta no le pregunto su nombre, al parecer tu lo conoces y queríamos saber si tu"

"Oh si, al Houshi"

"Si, ese mismo" le respondí entusiasmada.

"Sango quiere saber cual es su nombre para buscarlo, por que se llevaron muy bien y quiere platicar con el" dijo Kagome con su tono dulce.

"No es conveniente que se relacione con el" dijo Kaede en tono serio, casi agresivo.

"Pero, en verdad nos llevamos muy bien y yo quería.."

"No, será mejor que lo dejes en paz, si no te ha dicho su nombre es por que no quiere que lo molesten" me interrumpió enojada.

"Es que el me dijo su nombre, es solamente que no escuche..."

"Lo lamento, no puedo ayudarte, ahora si me disculpan, tengo que ir a monitorear a un paciente"

Kagome y yo nos quedamos sorprendidas con la reacción de la anciana, quien antes de marcharse me dijo.

"créeme linda, es por tu bien, será mejor que no lo busques mas"

Kagome me volteo a ver y me dijo " No se que le paso, normalmente es una mujer muy dulce"

"No te preocupes Kag, seguro tuvo un mal día, será mejor que nos vayamos"

Ambas caminamos hacia las escaleras cuando el localizador de Kagome comenzó a sonar, la buscaban para atender una emergencia,cuando tomo el aparato para enterarse sobre que era lo que pasaba, la vi palidecer.

"¿que sucede? " le pregunte al ver su cara asustada

" El hermano de Inuyasha entro en paro" espérame aquí, y llama a Inuyasha". Me dijo después de darme su celular para después correr al área de terapia intensiva en el mismo piso donde nos encontrábamos.

Sentí adrenalina, quería ayudar, pero no podía hacer nada estando en un hospital ajeno al mío. Por primera vez sentí mis manos temblar ante una emergencia médica. Abrí el celular de Kagome y busque el teléfono de Inuyasha, quien estaba identificado como "perrito". Cuando comenzó a sonar sentí mi corazón latir a mil kilómetros por segundo.

"Inuyasha?"

"sí, quien es?

"soy yo, Sango"

"hola Sango, que ocurre, ya esta todo listo para mañana?"

"no, Inuyasha, Kagome me pido que te llamara"

"por que ¿que sucede?"

"tu hermano entro en paro cardíaco, necesitan que vengas"

Aunque no podía verlo cara a cara se que el chico se asusto con lo que pasaba.
"voy para allá"

Fue lo ultimo que escuche antes de que la linea se cortara. Pude sentir su dolor y desesperación. Busque una silla y note que esa área del hospital estaba muy vacía. Estaba hundida en mis pensamientos cuando escuche su voz.

"Sango, de nuevo esperando? mejor deberías mudarte acá"

Cuando voltee lo vi, ahí estaba el Houshi, me dio tanto gusto verlo, pero no pude evitar llorar frente a el.

"¿que sucede?, tan mal me veo" trato de bromear. Pero cuando vio que no deje mi llanto se sentó junto a mi y toco mi barbilla para levantar mi rostro. Haciendo contacto visual me pregunto de nuevo.

"¿que sucede Sango?"

"Es que su hermano..." respondí entre sollozos.

"su hermano que?"

"tal vez muera"

"tranquila" me dijo secando mis lagrimas y sonriendo de una forma que me permitió sentir la tranquilidad que me pedía.

"no se bien de quien me hablas, pero todo estará bien"

"¿Por que¿por que ni siquiera se tu nombre y lloro frente a ti? le pregunte esperando que el pudiera explicarme por que me sentía de esa forma cuando estaba frente a mi.

"No lo se, lo importante es que estoy aquí para ti"

CONTINUA ABAJO

Seque mis ojos y trate de sonreír, el lugar seguía vacío, solo éramos el y yo.

"ahora si me dirás tu nombre"

"si, me llamo Miroku"

"Miroku?"

"si, se que es un nombre raro, pero no puedo hacer nada para cambiarlo"

"me gusta, es único" le respondí.

"ni tanto" me dijo sonriendo. "entonces ¿me contaras lo que pasa?"

"Oh si!, lo que pasa es que mi mejor amiga, casi hermana..."

"Kagome" me interrumpió.

"Sì, Kagome, esta embarazada"

"En serio!!" me dijo muy alegremente.

"Si, y bueno, su novio, le iba a proponer matrimonio"

"En verdad!"

"Si" le dije un poco extrañada por su reacción tan emotiva.

"Perdón, me gusta escuchar historias de amor" me comento.

"el problema es que el hermano de el esta en coma, y entro en paro cardíaco, y tal vez muera"

"No, no creo"

"pero si sucede... será muy injusto, y..."

"Ya veras que todo sale bien"

" Hablas como si los conocieras y pudieras ver el futuro" le dije escéptica.

"Sango, cuando llevas tanto tiempo en un hospital, como yo , aprendes que los milagros existen, los veo todo el tiempo. Tu que eres doctora lo deberías saber mejor que nadie"

"También hay historias tristes"

"Si, pero lo importante es no perder la fe, ya veras que tanto Kagome como Inuyasha salen bien librados de esto, y mas si están tan enamorados y van a tener un bebé"

"Tal vez tengas razón"

"Lo importante es que tu estas aquí para apoyarlos" me dijo poniendo su mano en mi hombro.

Nuevamente me perdí en sus ojos , era como si el tiempo se detuviera, sentí que nos comenzábamos a acercar, cuando, el celular de Kagome sonó.

"Es Inuyasha" le dije mientras me levantaba del asiento. "tengo que atenderlo" le comente.

"si, tomate tu tiempo" me respondió tranquilamente.

Me aleje un poco de el para contestar.

"¿que ha pasado? me pregunto nervioso.

"Kagome aun no regresa, no vi para donde se fue, me pidió que la esperara en la sala de espera de terapia intensiva"

"Ya estoy a punto de llegar" me estaba diciendo Inuyasha cuando alcance a ver a Kagome caminando hacia mi.

La note cansada pero tranquila, lo primero que hice fue pasarle el celular.

"Inuyasha?"

"Kagome¿como esta mi hermano?"

"Esta bien, logramos sacarlo del paro y estabilizarlo"

Sentí como un gran peso de encima se quitaba de mis hombros, los deje hablando y camine hacia donde Miroku me esperaba sentado. Pero por desgracia, ya no estaba ahí.
Gire en varias direcciones buscando con la mirada, pero Kagome me interrumpió.

"Todo salió bien" me dijo con rostro cansado.

"Me alegro,estaba muy preocupada, tu estas bien?"

"Si, solo me asuste" respondió suspirando de alivio. " Si quieres puedes irte a casa, yo esperare a Inuyasha, aquí" me comento

"no, esta bien, yo los espero"

"en verdad no es necesario, mejor me gustaría pedirte un favor"

"lo que quieras"

"podrías hacer algo de cenar? me gustaría lleva a Inuyasha a casa para que se relaje un rato, lo convenceré de que vayamos temprano, al fin y al cabo creo que su hermano estará estable"

"si claro, yo me encargo"

"muchas gracias"

"no hay problema, les preparare algo delicioso"

Mientras salía del hospital en camino a la tienda de autoservicio recordé algo.

"Si, pero lo importante es no perder la fe, ya veras que tanto Kagome como Inuyasha salen bien librados de esto, y mas si están tan enamorados y van a tener un bebé"

Nunca le dije que el novio de Kagome se llamaba Inuyasha.

XDDD me puse a gritar como loca la primera vez que leí esto YA QUIERO LEER EL FINAL!! XDDD qué tanto faltaba? poco, no? jejeje en fin espero pronto lo actualices

Creyeron que habia olvidado publicar este fik? amm nop jejeje aki toy de new y recuerden el fik es de Eztefita

Capítulo 4
El pianista

Pensé que seguramente fue idea mía, tal vez mencione el nombre de Inuyasha en algún momento, suelo hablar de mas cuando me pongo nerviosa, y estando con Miroku siempre me ponía nerviosa.
Decidí no darle vueltas al asunto y compre lo necesario para prepararles una rica cena a Kagome y su futuro prometido, después de todo el susto que acababan de pasar fue tan grande que merecían al menos un rato de tranquilidad con comida deliciosa, que no es por nada pero, siempre ha sido mi especialidad.
Justo estaba por entrar al departamento cuando mi celular sonó, era Kagome.

"Sango, no llegaremos a cenar, lo siento mucho, pero Inuyasha no se quiere mover de aquí y quiero estar con el ¿no te importa verdad?", me pregunto sin ocultar el cansancio en su voz.

"Kag, realmente te escuchas exhausta,¿ por que no vienes a descansar y yo me quedo con Inuyasha?"

"No te preocupes, trabajar en el hospital tiene sus ventajas, convencí a las enfermeras para que nos dejaran meter una cama extra, así es que dormiré y tratare que Inuyasha lo haga también"

"Esta bien, pero recuerda que le puede hacer daño al bebé si no descansas bien, ademas ¿ya cenaste algo?"

"Sí claro! fuimos a la cafetería, te lo prometo que estoy bien, pero no quiero dejar a
Inuyasha solo, esta muy alterado, después de que fuiste llego Sesshoumaru, su otro hermano y, bueno, tuvieron una discusión bastante fea, luego te platico con mas detalle."

"Lo comprendo, mandale un saludo a Inuyasha, y mañana temprano los paso a ver" le dije para finalizar nuestra conversación. Después mire las tres bolsas con alimentos que había comprado para preparar un minibanquete y suspire resignada.

A la mañana siguiente pase muy temprano al hospital para ver como estaba todo, justo cuando estaba en la entrada me tope con Kagome, quien se veía bastante descansada y sonriente. Me dijo que necesitaba irse a dar una ducha, y que Inuyasha seguía sin intenciones de moverse del lado de su hermano.

"Entonces subiré con el un rato, le daré lo que les traje de desayunar y sirve de que por fin conozco a su hermano" le dije sonriente a mi embarazada amiga.

"Si, es buena idea, aunque no esperes que este de muy buen humor" me dijo

"¿crees que sea inoportuno que suba un rato con el?

"No, le caes muy bien , le servirá otra compañía y seguro le encantara lo que preparaste"

"muy bien, entonces me quedare con el mientras tu descansas un rato en casa, pero ¿en que cuarto esta?"

"Es el 201 del cuarto piso"

Después de eso vi a Kagome alejarse para tomar un taxi, en verdad me sorprendió lo bien que se veía después de lo que yo imaginaba, fue una noche pesada.
Subí al cuarto piso y le pedí a una de las enfermeras que me indicara donde encontrar la habitación 201, una vez que supe el camino me dirigí al lugar, y pude notar que la habitación estaba casi al fondo de un pasillo. Me estaba acercando y estaba a punto de entrar cuando escuche la voz de Inuyasha y la que reconocí por la platica telefónica que tuve, como Sesshoumaru.

" Ya hemos perdido mucho tiempo, se que no te importa tu futuro, pero a mi si me importa el mío."

" El esta vivo y respirando solo, no hay nada que puedas hacer, ademas ya te dije que por mi te puedes quedar con la tonta empresa" escuche a Inuyasha responder bastante molesto.

"Las cosas no funcionan así y lo sabes Inuyasha, una tercera parte le pertenece a el, la necesito" dijo Sesshoumaru levantando la voz

"Puedes quedarte con mi tercera parte, dime donde te firmo y deja de molestar"

"el testamento de nuestro padre es muy claro, necesitamos estar de acuerdo para declararlo incapacitado legalmente y poder asignarle un representante legal"

"el cual serias tu ¿no?, pues no firmare la orden de no resucitación , y no firmare para declararlo incapacitado legalmente para que tu te apropies de lo que le pertenece, el despertara.."

"¿cuando!? ya son cuatro años, el no es mas que una carga , eso no se llama estar vivo, ademas ni siquiera tiene nuestra sangre" interrumpió Sesshoumaru en un tono tan frío que me hizo sentir un gran coraje.

"no importa que fue adoptado, el le dio mas felicidad a nuestros padres que tu y yo juntos, y lo amaron igual que a nosotros"

"no seas ridículo, fue solo un capricho para mostrarse como personas caritativas"

"tu no sabes nada" dijo Inuyasha con un tono de voz triste.

En ese momento decidí que seria mejor entrar para interrumpirlos, me ponía nerviosa
escuchar discusiones se ese tipo y me sentí desesperada, estaba a punto de dar el paso cuando sentí que alguien me tomaba del brazo.

"Disculpame, me fui sin despedirme" escuche la voz de Miroku, cuando voltee note en el una mirada triste que me sorprendio.

"No te preocupes, solo, me parecio extraño" le respondi sonriendo esperando que su mirada cambiara y tratando de calmar mi ansiedad previa.

"Lo se, pero estabas al telefono y no quería interrumpirte"

"Esta bien... en verdad no te preocupes"

Las voces de Inuyasha y Sesshoumaru aun se escuchaban, Miroku las escucho, y note aun mas tristeza en su mirada.

"¿Interrumpí algo? me dijo tímidamente.

"No, iba a entrar para calmarlos , pero..."

"y si mejor nos vamos de aquí y regresas cuando se calmen"

"si, creo que seria lo mejor"

Salimos del lugar, al ser tan temprano no había nadie en los pasillos ni en los cuartos, de repente Miroku se paro frente a una puerta y la abrió, era una habitación desocupada

"Espera aqui, voy por un par de cafés" me dijo para después marcharse rumbo a la maquina de café. Lo espere un par de minutos y regreso, entro por la puerta y se sentó a lado mío en la cama vacía.

"¿como sabias que este lugar estaría vacío?" le pregunte

"conozco este lugar como la palma de mi mano"

"ya lo creo"

"conocías a los que discutían?" me pregunto, aun note su mirada triste

"Si, bueno, solo a uno, era el novio de mi amiga"

"oh, la discusión se escuchaba grave, en verdad hubieras entrado si no llego a saludarte"

"si, tal vez se hubieran detenido, parece que hablaban de asuntos serios"

"dinero" dijo con molestia en la voz

"si¿como lo sabes?"

"perdón, lo escuche todo, estaba parado junto a ti todo el tiempo, te vi pasar y ..." me comento agachando la mirada.

"no te preocupes, en parte me alegro de que me hayas detenido."

Ambos nos quedamos estáticos mirando al rededor, era la primera vez que sentía un silencio incomodo estando con el.

"Te noto triste, que te sucede?" pregunte directamente

"¿En verdad?, no, no estoy triste" me respondió con su hermosa sonrisa que en esta ocasión no sentí genuina.

"Es raro, tengo poco tiempo de conocerte pero, siento que me estas mintiendo" le dije sin duda en mi voz

"Lo se, si, estoy un poco triste, pero estoy bien"

"Me puedes contar lo que quieras, soy toda oídos"

"Es que, bueno, no estoy triste, solo... extraño a mi familia"

Sentí la melancolía en su voz cuando me lo dijo, y vi como el vivaz azul de su mirada, se nubló un poco.

" Es decir, los veo y todo pero, extraño la vida normal que teníamos, ademas últimamente hay algunos conflictos por mi culpa y no puedo hacer nada al respecto"

"Miroku¿por que estas aqui?"

"Te lo dije cuando nos conocimos, no saben que pasa conmigo"

"Yo soy doctora, y puedo ayudar a investigar, conozco a muchos doctores..."

"Gracias, pero creeme, aqui hay excelentes doctores"

"Es que en verdad, te veo y me parece increible que estes enfermo, luces muy bien"

"lo se, soy guapo" me dijo guiñando el ojo izquierdo

"no me refiero a eso" respondí efusivamente sonrojandome

"Entonces te parezco feo, vaya Sango tu si que saber reanimar a la gente cuando esta deprimida"

"tampoco me refería a eso" dije aun sin disminuir el rojo de mi rostro.

El se quedo mirandome, lo cual no ayudo a mi rostro a recobrar su color normal. Me miraba tan dulcemente que me daban ganas de abrazarlo, pero me contuve mientras luchaba con mi sonrojo.

"¿Por que me miras así?" inquirí

"Haces esto mas dificil para mi" me respondió sin quitar la ternura de su mirada

"Por que dices eso?"

"no sabes lo que daría por poder salir de aqui y tener una cita contigo"

Lo hacia con toda la intención de que mi rostro fuera rojo para siempre, en ese momento llegue a la conclusión, Miroku es un malvado.

"bueno, entonces esa es otra motivación para que te recuperes pronto y podamos salir" dije bajando mi mirada tímidamente.

"¿En verdad saldrías conmigo?"

"depende"

"¿depende,¿ depende de que?"

"¿a donde me llevarías?

"te llevaría a conocer El cielo"

No pude contener la risa, y el puso una cara muy graciosa "En verdad, El cielo es una sala de conciertos en el teatro de la ciudad"

"¿en serio?"

"si Sango, al parecer muchos hombres te han dicho que te bajan la luna y las estrellas,
tanto que ya no lo crees ni cuando te lo digo en verdad"

"No, no muchos me han dicho eso" le respondí tratando de ocultar las risitas involuntarias que me provocaba su rostro indignado.

"eso me parece difícil de creer" me dijo mirando mis labios provocativamente, comencé a sentir calor.

"pues será mejor que lo creas" dije sintiendo un poco de nervios antes su mirada fija en mi rostro "¿y por que me llevarías ahí?" dije tratando de cambiar de tema.

"Por que ahí solía trabajar es mi lugar favorito de la ciudad y lo quiero compartir con mi persona favorita"

"¿Que hacías ahí?" le pregunte tratando de ocultar la sorpresa que me provoco que me llamara su persona favorita.

"pues, ahí me presentaba, soy músico"

Por su corte de cabello tan peculiar y los aros en sus orejas, asumí el tipo de música que tocaba.

"eres rockero?" pregunte casi asegurando.

El sonrío de una forma muy infantil y tierna, y después me miro de forma traviesa.
" de hecho, toco el piano y el violín. Antes de entrar aquí estudiaba para convertirme en director de orquesta"

"¿en verdad? eso es increíble"

"pues creelo, dentro de poco tiempo seré famoso en todo el mundo"

"vaya, que gran honor conocerte" dije imitando el tono burlón con el que a veces el decía las cosas

"ese tono no me gusto, pareciera que no me crees"

"no, en verdad te creo, me encantaría escucharte tocar"

"si, a mi me encantaría tocar para ti" note la vivacidad común en el regresando a su rostro, pero aun note su mirada triste.

Tomamos nuestro café guardando silencio un momento, aproveche para observarlo detenidamente, como seguramente el había hecho conmigo anteriormente. Al escuchar que era pianista decidí observar sus manos, eran realmente hermosas, en verdad eran "manos de pianista", largos y delgados dedos sostenían el vaso de cartón en el que se servia el café. Después vi su muñeca, en donde llevaba el brazalete del hospital y descubrí sin necesidad de preguntarle el número de habitación que ocupaba, 201, igual que el hermano de Inuyasha, pero no sabia aun de que piso.

Cuando levante la mirada lo sorprendí mirando mi escote e instintivamente lo cubrí con mi mano, por supuesto, sonrojandome fretenticamente.

"perdón, no era mi intención" dijo sobresaltado y extrañamente, sonrojado, lo cual encontré adorable.

"¿que no era tu intención? vaya, eres un pervertido"

"Sango, tienes que comprenderme, llevo mucho tiempo aquí encerrado y eres la mujer mas linda que he visto" dijo en un tono inocente que casi me hace creerle.

"Mejor ya no digas nada" dije en tono serio aun cubriendo mi escote con la mano.

"hombre al fin y al cabo, era demasiado bueno para ser verdad" comente agachando la cabeza.

Unos segundos después la levante para mirarlo ya que se había quedado muy callado, y lo que vi fue su rostro acercandose al mío.

Instintivamente comencé a acercar mi rostro yo también, cerré los ojos y sentí sus labios tocando los míos, sentí sus respiración tibia y transparente en mi piel, y conocí el sabor de sus labios, su saliva y su lengua. Después de unos momentos nos separamos para respirar un poco, la sensación de hormigueo en mis labios era muy intensa, era casi como si una droga exquisita hubiera entrado a mi organismo dandome una sobredosis que me embriagaba y me hacia querer más.
Busque su mirada aun con los labios húmedos de su esencia y lo que encontré fue una mirada aun más triste de la que vi cuando me sujeto el brazo minutos antes.

"Perdón, no lo pude evitar" me dijo agachando la mirada.

"Esta bien, yo también lo quería"

"No puedo hacer esto ahora Sango, perdoname, en verdad perdoname" me dijo levantandose de la cama y caminando hacia la puerta, en verdad se veía arrepentido. Justo antes de que saliera le grite.

"Miroku por favor no te vayas"

El solo me miro y me sonrío como habitualmente lo hacia.

"Será mejor que vayas a ver si Inuyasha y Sesshoumaru ya terminaron de discutir, te veo luego"

Finalmente salió dejandome en esa habitación que se había tornado fría y solitaria, toque mis labios tratando de sentir el calor que había dejado en mi, y sentí como si todo hubiera sido un sueño hermoso.

:: Ay no recordaba este episodio, qué bonitou!!! XDD espero pronto lo puedas actualizar